Ensayo: El Renacimiento de las Artes. De Brunelleschi por da Vinci a Buonarotti

Carolina Churruca Muñoz(*)

Publicado el: 2010-02-06

    


La forma en cómo nos relacionamos hace al modo de nuestra existencia; en ese modo se encuentra ese ”oscuro objeto del deseo” llamado saber; un objeto que hace cuerpo y nos constituye y con el que tenemos una relación de transacción y transición y que nos

 

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Para poder abordar el problema que nos convoca debemos partir por dilucidar el concepto de Renacimiento y que abarca este en sí mismo, en fin tratar de dejar en claro en donde, porque y en que consiste.

El término "Renacimiento" posee un sentido religioso, ya que se refiere al segundo nacimiento, el del ser nuevo, el hombre espiritual del que hablan en el Evangelio de San Juan y las Epístolas de San Pablo. En la era anterior a ésta, también se utilizaba porque indicaba el regreso del hombre con Dios, o mejor dicho, hacia Dios. Este término se relaciona con una renovación moral, intelectual y política, obtenida a través de la vuelta hacia los valores de la cultura grecorromana, en la que se considera que el hombre logró su realización.
Se puede decir que el Renacimiento tiene dos características fundamentales: el Naturalismo y el Humanismo.
Entendemos por "Naturalismo" el regreso por el interés en la investigación de la naturaleza.
El "Humanismo" es el reconocimiento del valor del hombre. Y se aspira al hombre orgulloso de sus propias fuerzas, que confíe en su capacidad de superación, que utilice la razón en toda su plenitud y que se adueñe de la naturaleza.
El movimiento humanista tiene como característica la vuelta a la Antigüedad clásica tanto latina como griega. Las formas de expresión dan gran importancia al cuerpo humano y al placer físico, acá se ve el contraste con el Medioevo, donde en el arte, todo lo referente al cuerpo quedaba oculto tras los ropajes que ocultaban sus formas. Florecía, dejaba atrás los temores atávicos, se liberaba de los miedos que esclavizaron los cuerpos y las mentes. Fue un periodo irrepetible. Se asistió a una eclosión del arte y la cultura.



Aparece la figura del artista, por lo que se abandona definitivamente el anonimato, y surge el taller del maestro, que es quien recibe los encargos de los clientes.
Se ?constituye algo extraordinariamente nuevo al aconsejar al pintor que se situé ante un modelo, si esta norma artística arranca del olvido milenario al concepto de que la obra de arte debía ser una fiel copia de la realidad(1)?

I

Brunelleschi y el espacio arquitectónico
El Renacimiento en la arquitectura utiliza los elementos constructivos de la Antigüedad, la bóveda de cañón, la cúpula, los entablamentos, los arcos de medio punto, las columnas, etc. Domina la arquitectura de carácter civil, hospitales, cárceles, etc. En las que el muro es de carga, además de cierre del espacio.
Durante el Quattrocento la figura más destacada es Filipo Brunelleschi (Florencia):
Brunelleschi (1377-1446) fue un gran arquitecto y escultor. Es el creador de la teoría de la perspectiva geométrica. Es autor de la cúpula de Santa María de las Flores, la primera arquitectura renacentista, grandiosa, elevada sobre un tambor octogonal y formada por una media naranja incluida en una cubierta apuntada, realizada en ladrillo y con tirantas y linterna de mármol.
Su característica principal consistía en el predominio del rigor matemático, marcado por el empleo de nervios ortogonales, líneas rectas, planos lisos y espacios cúbicos. Esta arquitectura de fachadas planas se convirtió en un paradigma para la ejecución de la mayoría de los edificios posteriores del renacimiento florentino.
?La iglesia seguía siendo el tema, edificio mas impórtate pero su forma tuvo que adaptarse al nuevo concepto de orden?. La adaptación consistió de una ?geometrización? general y en una acentuación de la centralización y hemos visto que en ambas intenciones aparecen en las obras de Brunelleschi(2)?.


Santa María de las Flores
A Brunelleschi se debe, de hecho, la formulación de las leyes de la perspectiva central, tal como afirma Alberti en su famoso tratado Della pintura. A partir de los monumentos clásicos y de las realizaciones del románico toscano, creó un estilo arquitectónico muy personal, en el que desempeñan un papel fundamental las matemáticas, las proporciones y los juegos de perspectiva. En todos los edificios que llevan su firma, las partes se relacionan entre sí y con el todo mediante fórmulas matemáticas, de manera que, por ejemplo, una sección es la mitad o la cuarta parte del todo, etc. ?Representa una síntesis nueva y magistral de los elementos ya existentes y engloba y acentúa los ingredientes burgueses y racionalistas del estilo arquitectónico del s xiv sobre todo a lo que se refiere ala tendencia hacia la horizontalidad?(3)
También entran en juego las combinaciones de diferentes figuras geométricas (cuadrado, círculo, triángulo), ya que para Brunelleschi, como buen renacentista, la estética no era un juego de azar sino el resultado de la correcta aplicación de una serie de leyes preestablecidas.
Su proyecto, que representó una gran innovación no sólo artística, sino también técnica, consistía en la superposición de dos bóvedas esquifadas octogonales, una dentro de otra. Esta disposición permitía un reparto de esfuerzos junto con una ligereza excepcional, y se convirtió en el modelo constructivo de cúpula durante varios siglos.
El arquitecto florentino partió de la necesidad de una estructura de ocho nervios, que discurren por el exterior y sirven de apoyo para el resto de los elementos decorativos, como los relieves con motivos arquitectónicos, los ocho ojos de buey y la elegante linterna que culmina el conjunto.
Por primera vez en la historia una cúpula ofrecía el mismo aspecto estructural en el que se generan dos tensiones, interior que en el exterior. El espacio interior se organiza de acuerdo a las leyes de la perspectiva geométrica, teoría que consiste en la pirámide visual (el espectador estaría situado en la base de una pirámide cuyo vértice es el punto de fuga hacia el que convergen todas las líneas del espacio). Las líneas longitudinales quedan cortadas por otras transversales, originándose cubos en profundidad hasta el fondo.




Es un receptáculo especial continente en donde se centran tensiones centrípetas y centrifugas, trabaja con dos redes arquitectónicas una interna y otra externa, es un octágono y las ocho fuerzas en tensión que se cruzan.
II


Leonardo y la percepción de la Naturaleza

"Hubo una vez alguien que podía contemplar el mismo espectáculo o el mismo
objeto ya como lo hubiera visto un pintor o ya un naturalista,
ya como un físico, y en otras ocasiones como un poeta;
y ninguna de esas miradas era superficial"(4)
Paul Valéry

Leonardo da Vinci fue uno de los primeros en observar y analizar científicamente la naturaleza con ojos modernos, coincidieron con él la vocación científica y la preocupación técnica, que serán caracteres eminentes de los nuevos tiempos, su vivo interés por los hechos, su curiosidad insaciable ante los casos singulares y concretos de la realidad se acompañaron de un sentido para la teorización.
Se daría cuenta, que la perspectiva es la ciencia de la visión, y, por lo tanto, debe comprender todos los aspectos del universo visual. En su tratado de pintura, Leonardo teorizó en forma completa sobre tres tipos de perspectiva: la perspectiva del color, la de la forma y la de la disminución. El nuevo sistema de perspectiva basado en luces y sombras queda ejemplificado a plenitud en ?La Virgen de las rocas?, retablo pintado por Leonardo da Vinci. Demostró que la base de la perspectiva albertiana es insuficiente para representar la realidad ya que en ella todas las cosas dependen de un rayo central único.
Se trata de un conocer visual activo, o sea, de un pensamiento que lejos de consistir en conceptos, se atiene a las significaciones de líneas, formas y figuras, invirtiendo. Todo lo que se halla en el espíritu en virtud de la contemplación, puede alcanzar cumplimiento perfecto sólo mediante la ejecución manual.



Según Leonardo, la naturaleza nos habla en el idioma de los detalles, de lo minucioso, de los aspectos del mundo exterior que en primera instancia estamos tentados a pasar por alto o a juzgar como menores y/o irrelevantes
?Para Leonardo un paisaje era lo mismo que un ser humano parte de una vasta maquinaria, que debía inatentarse comprender parte por parte y, a ser posible también en su conjunto?(5)
Con su atención minuciosa al detalle señaló que el camino para alcanzar el conocimiento de la naturaleza requiere la reducción de los problemas a las dimensiones que puedan manejarse, sin pasar por alto aspectos que puedan ser cruciales. Para él, la Naturaleza era el espacio donde debía buscarse el conocimiento. Y entendió que sus límites debían someterse a la formulación de las leyes matemáticas. Estaba convencido que la ciencia podía prever, imitar e, incluso, reproducir los fenómenos naturales. El maestro afirmaba que sólo el ser humano era capaz de develar los misterios de la realidad y acotar sus fronteras.
Sus observaciones sobre la luz y sombra, fueron primordiales debido a la importancia que tiene el relieve, para él. Su deseo era poder conseguirlo mediante estos medios.
?El sombrado es para Leonardo un complemento de la forma mientras que para los pintores venecianos lo es el color?(6)
A pesar de toda su grandiosidad y lo sugerente de sus representaciones, sus figuras parecieron en un principio, mas estatuas que seres vivos, la razón de ello fue que cuanto mas consistente copiaba una cosa, detalle por detalle, menos podía imaginar como se movía y respiraba. Habiéndose dado cuenta de lo que pasaba en su trabajo decide abandonar al espectador algo por adivinar y esto lo consigue dejando los contornos, del dibujo o la pintura en cierta vaguedad como si desapareciera en la sombra, así la impresión de duraza y rigidez fue evitada , esta es su famosa invención , la técnica del sfumato. El contorno borroso y los colores suavizados le permitieron fundir la sombra con otra, esto le permite dejar siempre algo a la imaginación.
Leonardo se enfrentó a esta infinita realidad con su pincel seguro y elegante y su mirada fotográfica, y reprodujo fielmente a la naturaleza.


III


Miguel ángel y la continua contrariedad

?Hemos asistido, pues en la poesía y en el arte miguelanescos a un doloroso y ardiente itinerario. El afán sacralizador y espiritualizador de una manera que exalta y se desearía eterna y la necesidad contraria de prescindir de todo ello (no sin lucha) para intentar alcanzar un puro espíritu vencedor de aquella anhelada materia?

Para tratar de dilucidar el enunciado que nos habla de lo miguelanesco, primero debemos aclarar conceptos y contextos,

El periodo en el cual vive Buonarrotti, es el renacimiento, caracterizado principalmente por el paso del teocentrismo al antropocentrismo y la recuperación de los valores de la antigüedad clásica. Más específicamente, hay que colocar a Buonarrotti dentro del contexto neoplatónico de Florencia, donde poseían la idea del ascenso del alma hasta la intuición de lo divino desde los dos fundamentos doctrinales del pensamiento hebraico y el pensamiento cristiano. (Esto se refleja en la obra del Juicio Final)
?El neoplatonismo florentino es ante todo un clima de erotismo espiritual al que el paganismo ambiental -no platónico- dota de una dimensión externa más corporal y más griega. Todo este ámbito hallo como he dicho, en Miguel ángel adecuada tierra de cultivo. Y nos lleva a dos cuestiones relacionadas con la obra del escultor, y con buena parte de su poesía, primero la fisicidad en Miguel ángel; y su homosexualidad, en segundo término?(7). Pag14



Fundamental en el arte de Miguel ángel, es su amor por la belleza masculina, la cual lo atraía tanto estética como emocionalmente. Tales sentimientos le causaban gran padecimiento, y expresaba la lucha entre los ideales platónicos y el deseo carnal en sus esculturas, dibujos y poesía.
Su mayor amor fue Tommaso dei Cavalieri (1516-1574), quien tenía 16 años cuando se encontró con él en 1532, Buonarrotti teniendo 57. Le dedicó a Cavalieri cerca de trescientos sonetos y madrigales, constituyendo la más vasta secuencia de poemas compuestas por él. Aunque hay quienes se apuran a afirmar que la relación era meramente afecto platónico, los sonetos son la primera gran secuencia de poemas en cualquier idioma romance de un hombre dirigido a otro.

Bastaría con ver gran parte de su obrar para poder comprender casi de súbito el inmenso apetito carnal, su deseo por la materia. El piensa en el amor, en sentimientos y en la carnalidad, amor que tiende siempre a rechazar y sublimarlo, esto tiene que ver con las raíces religiosas que fueron forjadas en su juventud lo amarran, por otra parte la sublimación es neoplatónica.
La belleza en general y en particular al de Cavalieri se convierte para Miguel ángel en el principio de un tormento y sufrimiento moral.
?Depurar el amor, morir al cuerpo apeteciendo el cuerpo, espiritualizar el erotismo, trascender el peso y esplendor de la materia?

El interés de los poemas de Miguel ángel radica en que nos convierten en espectadores de esta lucha: la lucha de una naturaleza fuerte por ennoblecerse y armonizarse; la lucha de una pasión devastadora, que anhela ser resignada, dulce y meditabunda. Como consecuencia del carácter ocasional e informal de su poesía, ésta nos acerca al autor, a su propio entendimiento, y temperamento, más de lo que probablemente podría hacerlo ninguna obra con pretensiones literarias.


La obra toda de miguel ángel esta basada en la plural tensión de varias contradicciones. su poesía, sin ser nunca correlato de sus obras en mármol o de su pintura , esta , sin embargo , sometida a idéntica fuerza creativa y de contrarios de un lado la atracción poderosísima por el cuerpo y la belleza física; de otro , un apetito espiritual , cercano a veces al misticismo y que le lleva a rechazar tal cuerpo , no solo por ser instrumento de pecado , sino mas profundamente , porque la realidad defrauda los hondos anhelos del espíritu.


CITAS
1. Panofsky, Edwin. Idea. ensayos de arte. Pág. 46
2. Norberg-Shulz, Cristian. Arquitectura occidental. Capitulo VII. La arquitectura del Renacimiento. Pág. 118.
3. Antal, Frederick. El mundo florentino y su ambiente social. Pág. 230.
4. Valéry, Paul. "Leonardo y los filósofos". Ed. Kra, París, 1929.
5. Clark Kenneth. Leonardo da Vinci. Ed. Alianza. Pág. 93.
6. Clark Kenneth. Leonardo da Vinci. Ed. Alianza. Pág. 86.
7. Buonarrotti, Miguel ángel. Sonetos completos. Cátedra, Letras Universales; Madrid 1987.Pág. 14
8. Buonarrotti, Miguel ángel. Sonetos completos. Cátedra, Letras Universales; Madrid 1987.Pág. 18
9. Buonarrotti, Miguel ángel. Sonetos completos. Cátedra, Letras Universales; Madrid 1987.Pág. 12



Bibliografía

? Panofsky, Edwin. Idea. ensayos de arte.

? Antal, Frederick. El mundo florentino y su ambiente social.

? Norberg-Shulz, Cristian. Arquitectura occidental.

? Clark Kenneth. Leonardo da Vinci. Ed. Alianza

? Valéry, Paul. Leonardo y los filósofos. Ed. Kra, París

? Buonarrotti, Miguel ángel. Sonetos completos. Cátedra, Letras Universales; Madrid 1987.






Textos de referncia


? Argan, Giulio, Carlo. Renacimiento y barroco. Akal / Arte y estetica; Madrid 1987.

? Burke, Peter. El Renacimiento. Barcelona, Ed. Crítica, 1999


(*) Estudiante de Bellas Artes Universidad Arcis. Santiago de Chile. CHILE



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